A medida que pasa el tiempo, las joyas de oro van perdiendo el brillo. Es cierto, que este metal precioso, es uno de los más resistentes. Sin embargo, los agentes externos (sudor, contaminación, suciedad…) tienden a oscurecer su resplandeciente color dorado.
¿Tienes piezas de oro con estas características? ¡Descuida! te vamos a revelar varias técnicas para limpiar las joyas de oro en casa sin dedicar mucho esfuerzo.
Antes de iniciar, considera que hay diferentes tipos de oro: amarillo, blanco y rosa. Esto hace que su quilate varíe, y por lo tanto, su modo de limpieza también.
¿Cómo limpiar oro?
Hay diseños de joyería que se elaboran solo con oro, pero también hay otras opciones en las que se combina con otros metales, dando como resultado aleaciones diferentes al dorado tradicional.
A la hora de limpiar joyas, es importante tomar en cuenta las características de la pieza, de esta forma podrás aplicar la técnica adecuada para cada una. Sigue leyendo y aprende sobre el cuidado del oro.
Limpieza del oro blanco
Para su elaboración se mezcla oro de 24 quilates con paladio, plata o platino. Los pendientes, anillos y colgantes de oro blanco suelen tener una capa brillante de rodio, que al ensuciarse se torna mate.
Para devolverle su destello inicial, lo más recomendable es enviarlo a una joyería especializada, ya que el rodio dificulta la limpieza. Pero, si no tienes la oportunidad de hacerlo, entonces sigue estos pasos, sin saltarte ninguno:
1- No guardes joyería de oro blanco junto a objetos de plata. Ambos metales se manchan al entrar en contacto.
2- Bate un huevo e impregna un paño suave con la mezcla.
3- Frota el paño sobre toda la superficie de la joya y deja secar.
4- Toma un paño limpio y frota de nuevo la pieza hasta que recupere el brillo original.
Limpieza de oro amarillo
Es el más común en la orfebrería. Su ventaja principal es que no se ennegrece con facilidad y para mantenerlo se requiere muy poco esfuerzo:
Agua y jabón:
1- Añade en un recipiente agua tibia y jabón neutro. Remueve hasta hacer espuma.
2- Sumerge las joyas que deseas limpiar y déjalas en el recipiente durante 15 minutos.
3- Pasado ese tiempo comienza a frotar las joyas con un cepillo de cerdas suaves.
4- Aclara con agua tibia y seca con una toalla, preferiblemente de gamuza para no rayar las piezas.
Sal y limón:
1- En un recipiente mezcla zumo de limón y sal, hasta formar una pasta.
2- Introduce un cepillo suave en la mezcla y cepilla las joyas hasta eliminar el color negro.
3- Termina el proceso secando la pieza con un paño de microfibras
Zumo de cebolla:
1- Licua una cebolla y sumerge las piezas en el zumo.
2- Deja remojando durante dos horas.
3- Después de ese tiempo, cepilla las joyas para eliminar la suciedad.
4- Para eliminar el olor, sumerge durante 15 minutos en agua y jabón.
5- Seca con un paño suave.
Estos trucos caseros son útiles para conservar el valor de tus joyas de oro. Te aconsejamos que escojas un solo método y lo pruebes en una pequeña fracción de la pieza para evitar daños.