En la alta joyería se emplean varios tipos de oro. Las diferencia tienen que ver con el grado de pureza, expresado en quilates, y las variantes de color.
A medida que pasa el tiempo, las joyas de oro van perdiendo el brillo. Es cierto, que este metal precioso, es uno de los más resistentes. Sin embargo, los agentes externos (sudor, contaminación, suciedad…) tienden a oscurecer su resplandeciente color dorado.
El mundo de la joyería y de las piedras preciosas es fascinante, ¡quién no se siente atraído por el oro o por las joyas de diseño! Y seguro que alguna vez en la vida has tenido la incertidumbre de si una pulsera o unos pendientes eran de oro auténtico, por ello aquí te ofrecemos unos trucos para salir de dudas.